En un mundo que gira veloz, donde los ojos apenas se cruzan y las palabras pierden peso, algo se desdibuja: la empatía.
Hemos olvidado que las manos no solo son para trabajar, sino para tender puentes. Que los corazones laten más fuerte cuando sienten al otro. Hoy, la indiferencia se viste de rutina, y el dolor ajeno se desvanece entre notificaciones.
Pero aún hay tiempo. La empatía no muere, solo duerme. Despertémosla con gestos pequeños, con la mirada que escucha y el abrazo que sana. Porque al final, somos espejos: lo que damos, vuelve.
Recuerda, en el alma del prójimo también habita la nuestra.
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Mensaje de Año Nuevo
Un nuevo año es una página en blanco, un lienzo esperando ser pintado con colores de esperanza y amor.
Este 2025, que nuestros pasos encuentren caminos hacia el entendimiento, y nuestras manos trabajen para construir un mundo más justo. Fomentemos valores que iluminen la oscuridad: respeto, compasión, y un amor incondicional al prójimo.
Que la alegría sea compartida y las diferencias nos enriquezcan. Que cada día sea una oportunidad para sembrar bondad y cosechar paz.
Feliz Año Nuevo! Que juntos hagamos del mañana un reflejo de nuestros mejores sueños.